MSI Afterburner es un programa ideal para hacerle overclock a la tarjeta gráfica, funcionando con todas las marcas disponibles. Veamos cómo hacerlo.
Al comprar una tarjeta gráfica, lo primero que queremos es tener el mejor rendimiento posible, de forma tal que podamos jugar los títulos más nuevos. En este caso, utilizar este software servirá para tener un total control sobre ella, aportándonos información específica del hardware y realizando pequeños ajustes para optimizar el funcionamiento para los juegos más exigentes.
Es decir, con MSI Afterburner podremos encontrar el equilibrio perfecto entre la temperatura y el rendimiento, ya que, en ocasiones, esta no viene de forma predeterminada por el fabricante. Entonces, en este tutorial armaremos un perfil más personalizado, que se adapte a las necesidades gamers que tengamos en ese momento.
Cómo funciona MSI Afterburner
En este sentido, veremos que esta aplicación contará con una serie de opciones de lo más variada. Por ejemplo, podremos apreciar un monitor de hardware completo, con información en la pantalla de forma personalizable, cambiando la apariencia o habilitar la opción de overclock automático, en caso de que tengamos una tarjeta compatible. Caso contrario, podrás seguir nuestras instrucciones para que lo hagas de forma segura y rápida.
MSI Afterburner tiene una instalación sencilla. Lo primero que debemos saber es que, al mismo tiempo, se estará instalando el RivaTuner Statistics Server, que será aquel programa que proporcione en pantalla todos los datos de las sesiones de juego. Además, se podrá cambiar el color o la información que aparecerá en pantalla, ideal para ver el rendimiento de la gráfica.
Entonces, lo que deberemos hacer será ajustar los valores correctos en este programa, buscando equilibrar la frecuencia de reloj y la memoria con una temperatura máxima que se adapte a las exigencias de la GPU. Entonces, hacer un overclock sería lo opuesto a hacer un downclocking de la tarjeta gráfica, o sea, en vez de reducir la frecuencia, aumentarla por encima de sus valores.
Cómo hacer el proceso de overclock
Lo primero será descargar e instalar el programa. Cuando lo hayas abierto, deberás comprobar la temperatura máxima que soportará tu tarjeta gráfica sin ninguna complicación, por lo que la deberás insertar en el apartado de Temp. Limit, digitando los valores con el teclado. A continuación, podrás incrementar la frecuencia de reloj en, por ejemplo, +50. Esto mismo podemos aplicarlo en la frecuencia máxima de memoria en +50, por citar también otro ejemplo.
En caso de que tengamos la opción de dejar la velocidad automática de los ventiladores podemos dejarla así. En caso contrario, la aumentaremos según la temperatura en la que estemos teniendo resultados, luego de aumentar los valores anteriores. Ahora solamente debemos tocar en el botón de aplicar.
Ahora, deberás ejecutar el programa Kombustor aproximadamente durante unos 40 minutos, para que se pueda comprobar la estabilidad de la tarjeta gráfica con los nuevos valores. También deberás comprobar la temperatura de la GPU para que no se eleve demasiado ni se generen ruidos, aunque eso dependerá de los gustos personales.
En caso de que la aplicación se vuelva inestable, deberás elegir los valores anteriores a realizar la prueba, ya que el overclocking habrá alcanzado un punto máximo de soporte por la tarjeta gráfica. Caso contrario, deberás volver a ejecutar los pasos anteriores.
Una vez que hayas encontrado el equilibrio ideal, tendrás una potencia extra que disfrutarás en cualquiera de los perfiles. A saber: MSI Afterburner soporta hasta 5, por lo que podrás guardarlo en cualquiera de esos espacios, para tener configuraciones diferentes y poder optar entre una u otra o volver a los valores predeterminados. Por ende, podrás disfrutar de un rendimiento superlativo a la hora de jugar.